La Iglesia de San Agustín

Eremitorio de los Santos Lucía y Antonio

Está situado en el territorio de la Montagnola entre Montarrenti y el Puente de Rosía y fue probablemente fundado hacia finales del siglo XII. Formó parte de la Orden de los Eremitas de San Agustín entre los años 1244 al 1250. En 1267 fue consagrada la nueva iglesia, que inició su construcción a partir del 1240. En esta ocasión a los fieles que visitaran la iglesia recibirían indulgencias por los obispos de Volterra, Grosseto y Massa.
 A partir del siglo XIII se encuentran  importantes personalidades religiosas como el Beato Pietro de Rossi, conocido por su gran amor hacia la Santa Cruz y al Beato Giacomo de Rosía, celebrado por sus altos méritos de castidad, observancia y caridad. A este último se le atribuyen varios episodios milagrosos, el más conocido es el de su capacidad de hacer fructificar cada año, y no cada dos, un particular tipo de manzano para saciar a los pobres.
 El antiguo eremitorio nunca se unio con el de Lecceto pero continuó a formar parte de la Provincia de Siena. Su lenta decadencia empezó en el siglo XVI y terminó pocos siglos después con su eliminación.